sábado, 19 de septiembre de 2015

viernes, 18 de septiembre de 2015

domingo, 13 de septiembre de 2015

Agradecer a Dios




La vida es tan bella o tan horrible como la quieras ver, yo crecí en un pueblo muy pobre, no teníamos que comer mi padre maltrataba en gran manera a mi madre, se partía un huevo cocido entre cuatro , con un poquito de frijoles,
nosotros nunca tuvimos un abraso de nuestro padre, ni siquiera un consejo, eran puros regaños y maltratos, pero entre todo ese sufrimiento había mucha felicidad, éramos niños felices, nos encantaba jugar, siempre y cuando no este papa, a pesar de comer tan solo frijoles, agradecíamos a Dios, por el simple hecho de existir, eso nos enseñó mi madre, veíamos que la gente se quejaba con tan poquito que sufría y maldecía incluso al creador de la vida, mas sin embargo nuestra madre nos enseñó que debemos amar aún a nuestro padre que nos maltrataba, pues él era el hombre más infeliz sobre la tierra, pues el que no sabe dar amor , tampoco es capaz de recibirlo..

martes, 8 de septiembre de 2015

Entrevista con Dios







Soñé que tenía una entrevista con Dios…


“¿Te gustaría entrevistarme?” Dios me preguntó.
“Si tienes tiempo,” le dije.
Dios sonrió: “Mi tiempo es eterno, ¿qué quieres preguntarme?”
“Ninguna nueva, ni difícil para Ti,” le respondí. “¿Qué es lo que más te sorprende de la humanidad?”
Me contestó:
“Que tienen prisa por crecer, y tan pronto crecen quieren ser niños de nuevo.
Pierden su salud para hacer dinero y luego deben usar su dinero para recobrar la salud.
Que por pensar ansiosamente en el futuro, descuidan su presente, con lo que no viven el presente ni el futuro.
Que viven como si no fueran a morirse, y se mueren como si no hubieran vivido...”
Las manos de Dios tomaron las mías y estuvimos en silencio por un rato y entonces le pregunté...
“¿Me dejas hacerte otra pregunta?”
No me respondió con palabras, sino sólo con Su tierna mirada.
“Padre, dime, ¿qué lecciones deseas que como Tu hijo yo aprenda?”
Dios me respondió con una sonrisa:
“Que aprendas que no puedes hacer que todos te amen y lo que sí puedes hacer es amar a los demás.
Que aprendas que lleva años construir una confianza y sólo segundos destruirla.
Que lo más valioso no es lo que tienes en tu vida, sino a quién tienes en tu vida.
Que aprendas que no es bueno compararte con los demás, pues siempre habrá alguien mejor o peor.
Que aprendas que una persona rica no es la quetiene más, sino la que necesita menos.
Que aprendas que debes controlar tus actitudes, o tus actitudes te controlarán cada vez.
Que aprendas que únicamente toma unos segundos herir profundamente a una persona que amas, y que puede tomar muchos años cicatrizar la herida.
Que perdonar se aprende perdonando.
Que aprendas que hay personas que te aman entrañablemente, pero que muchas veces no saben cómo expresarlo.
Que aprendas que el dinero lo compra todo menos la felicidad y que si primero eres feliz, será más fácil que tengas dinero.
Que tanto los pobres como los ricos pueden ser buenos o malos, sin importar el dinero que tengan o que no tengan.
Que a veces tienes derecho a sentir molestia, pero eso no te da derecho a molestar a quienes te rodean.
Que los grandes sueños requieren tanto de grandes alas, como de un tren de aterrizaje para lograrlos.
Que los amigos de verdad son tan escasos, que cuando encuentras uno, has encontrado un verdadero tesoro.
Que aprendas que dos personas pueden mirar la misma cosa y las dos percibir algo diferente.
Que aprendas que eres dueño de lo que callas y esclavo de lo que dices.
Que lo que siembras, cosechas: si siembras chismes, cosecharás intrigas; si siembras amor, cosecharás felicidad.
Que aprendas que la verdadera felicidad no es lograr lo que no tienes, sino aprender a disfrutar de lo que tienes mientras buscas mejorar.
Que aprendas que la felicidad no es cuestión de suerte, sino producto de tus decisiones: Decide ser feliz con lo que eres y tienes, o muere de envidia y celos por lo que no eres o te falta.
Que sin importar las consecuencias, quienes son honestos consigo mismos llegan lejos en la vida.
Que a pesar que pienses que no tienes nada más que dar, cuando un amigo llora contigo, encuentras la fortaleza para vencer tus dolores.
Que retener a la fuerza a las personas que amas, les aleja más rápidamente de ti; y al dejarlas ir, las dejas para siempre a tu lado.
Que nunca harás nada tan grande para que Yo te ame más, ni nada tan malo para que deje de amarte mucho; simplemente te amo a pesar de cómo eres.
Que aprendas que la distancia más lejos que puedes estar de mi es la de una simple oración.
Que perdonar a los demás no es fácil, que no siempre es suficiente ser perdonado por otros y que perdonarte a tí mismo es el primer paso...” 
“Gracias por tu tiempo,” le dije. “¿Hay algo más que quieras que aprenda?”

lunes, 7 de septiembre de 2015

Griacias Dios



LA ENSEÑANZA MÁS GRANDE DE JESÚS ES EL AMOR




LA ENSEÑANZA MÁS GRANDE DE JESÚS ES EL AMOR


Objetivo: Comprender la eminencia del amor en la relación de Dios con y el ser humano y en las enseñanzas de Jesús.
Texto de oro: En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros. Juan 13:35
Introducción
Jesús, con sus enseñanzas, provocó la más grandiosa de las transformaciones del mundo, en su mentalidad y en sus leyes. Entre muchas enseñanzas resalta el amor como la base de la convivencia humana, en la familia, en la iglesia y en la sociedad en general. El amor que Jesús enseñó es un concepto muy elevado pero posible de practicar, de hecho, él mismo mostro en su propia experiencia como llevarlo a la práctica. Eso nos anima a pensar que el amor el posible y que es la solución a tantas situaciones de odio e injusticia que se viven a niveles individuales y sociales.
El amor ágape. Mateo 5:38-48; 1Corintios 13
En nuestros tiempos la palabra amor ha perdido sentido. Se usa con tanta frecuencia y en forma indiscriminada que llegamos a confundir su significado. El amor del que hablamos es algo más que el amor entre una pareja y es algo mayor que el que comúnmente se da entre amigos. En la mayoría de los casos el amor que se declara depende del atractivo físico, de la conveniencia material y de la correspondencia del ser amado, es decir, amamos a quienes nos aman y somos indiferentes a los demás, este es el “amor porque”, o sea, te amo porque eres bueno… atractivo… agradable… inteligente… rico… etc. En nuestra Biblia la palabra utilizada es ágape, amor ágape es amor incondicional, podríamos decir que es “amor a pesar de”, te amo a pesar de que no me ames… a pesar de que me hagas daño… a pesar de que no me des nada. Esta es la forma en que Cristo nos amó, al grado que estuvo dispuesto a entregar por nosotros su vida, ese es el amor al que estamos llamados. Por eso dice Jesús que amemos a nuestros enemigos y hagamos bien a quienes nos hacen mal. El apóstol Pablo hace una descripción de esta clase se amor en 1 Corintios 13.
El amor resume la ley. Mateo 22:34-40; Romanos 12:7-10
La ley ha sido hecha para restringir la maldad del hombre contra el hombre, pero si todos los seres humanos nos amaramos en la misma intensidad y con la misma pureza, no necesitaríamos leyes. Jesús enseñó sobre los dos mandamientos más importantes: el primero es “amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente” “y el segundo es semejante —dice Jesús—: amarás a tu prójimo como a ti mismo.” Y añade “De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas.” Acorde con esto el apóstol Pablo lo desglosa de la siguiente manera: “… porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley. Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor.” Por lo tanto, si quieres que tu vida marche bien, hermano, aprende a amar, cumple estos dos mandamientos y tu vida será realmente diferente, ama a Dios y ama a tu prójimo.
El amor como prueba del discipulado. Juan 13:34-35; Romanos 5:6-8;
Si nos declaramos seguidores de Jesucristo y no sabemos amar y perdonar, en realidad no le seguimos. En su propia experiencia, el Señor mostró su amor al orar por quienes le crucificaban, exclamó y dijo “Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen”. El cumplió sus propias enseñanzas y probó con ello que es posible llevarlas a la práctica. Su declaración es enfática en Juan 13:35, se sabrá que son mis seguidores si tienen amor los unos con los otros. Entre nosotros debe haber siempre amor, siempre perdón y siempre tolerancia. Si otros cometen errores también nosotros los cometemos, por lo tanto nada debe empañar nuestra comunión. Y vamos más lejos, si logramos incorporar al amor como parte de nuestro comportamiento cotidiano, en cualquier lugar donde estemos y con cualquier persona, puesto que todos son mi prójimo; la gente sabrá que somos seguidores del Señor, no amemos de palaba ni de lengua, sino de hecho y en verdad. Amén.